miércoles, 12 de agosto de 2009

Nigeria y pobreza


Por Pedro Brieger


En los pasillos de los bancos más importantes se suele decir que el petróleo es el negocio más rentable del mundo. Para que esto sea así tiene que haber una combinación de factores que incluyen la tecnología brindada por las empresas de los países más desarrolladas, mano de obra barata en un país pobre del Tercer Mundo y los grandes negociados con el poder de turno. Nigeria es un caso testigo de la combinación de estos elementos. Al haber sido una colonia británica durante décadas está asegurada la dependencia de la tecnología que puedan ofrecer las empresas de la antigua metrópoli como la angloholandesa Shell. Es el país más poblado del Africa y millones viven en condiciones de extrema pobreza aunque es el primer productor de petróleo del continente.

Nigeria es un paraíso para las petroleras. Los gobiernos militares y civiles que se sucedieron desde la independencia formal en 1960 garantizan que las empresas puedan hacer grandes negocios. Todos dependen de las empresas para enriquecerse y –a cambio- les garantizan que puedan funcionar con absoluta libertad y sin control del Estado sobre los efectos negativos que puedan causar al medio ambiente. La Shell explora en casi treinta países, sin embargo, se calcula que sólo en Nigeria se han producido un 40 por ciento de sus derrames contaminantes. Y si aparecen movimientos locales que intentan limitar la destrucción del medio ambiente, el poder militar de turno los reprime, tal cual sucedió en los noventa con un grupo liderado por el escritor Ken Saro-Wiwa que fue ejecutado en 1995 junto a ocho personas más.

Sus familiares comenzaron una demanda internacional contra la Shell en tribunales de Nueva York. Después de 14 años la empresa aceptó indemnizarlos con quince millones de dólares, reconociendo de hecho la relación entre ella y el gobierno militar de la época. Poca plata para una de las multinacionales más poderosas del planeta. A tono con la época en su página web de Nigeria la Shell parece más una ONG dedicada a proyectos educativos y ambientalistas que una petrolera. Los nigerianos seguramente se lo agradecen.
Contacto: sadarim.miradas@gmail.com